Miércoles 14 de junio de 2017
Hora:10 30 am a 1 pm
Lugar-. Municipio Pampanito-ETARZ
Convite Cultural
Cuando los amigos se convocan para realizar una faena ,esta vez encausada en las manifestaciones culturales que cada uno realiza..Trujillo es rico en talento,somos canción,somos arte,somos poesía,somos teatro y somos Un Convite Cultural,para convertir a este estado en ese mañà de sueños que soñamos a veces y que queremos sea una realidad. Es asì, como cada dìa somos mas compañeros y compañeras unidos en èsta noble tarea de hacer actividades culturales nutricias,es cultura para la vida, y para encender las llamas del interés genuino por el arte..
esta mañana la ETARZ- Pampanito fue nuestro lugar para expresarnos con toda la variedad artística de es convite cultural que tuvo títeres Buranku,cuentos asistidos,marionetas ,dinámicas y la presentación del sin igual Capitán Barrios.
Texto y fotos: Pedro Dàvila
Llegando para esa gran actividad cultural
Este pensamiento de Eduardo Galeano dibuja perfectamente lo que hacemos con estos encuentros,con estos Convites Culturales.
El Capitán ,calentando motores.
Iniciando la actividad, Wilfrido Gonzalez hace la presentación
Las primeras en la acción; Miriam Laguna y Johana Barrios con sus dinàmicas
Pinta caritas para las mas pequeñas
EL CAPITÁN BARRIOS Y SUS CUENTOS....de caminos volados en un Zamuro.
Un invitado Cubano Venezolano o Venezolano Cubano: Virgilio Meregildo
con sus cuentos y sus chistes.
Gerardo Bencomo con su cuatro ,agregando la música y la emoción de acompañarle en el canto
Josè Gregorio Azuaje con un cuento asistido.
LA RATONCITA PRESUMIDA
Hace ya bastantes años, doscientos años tal vez, por escapar
de los gatos y de las trampas también, unos buenos ratoncitos se colaron en un
tren y a los campos ratoncita presumida1se marcharon para nunca más volver.
Andando, andando y andando llegaron por fin al pie de una
montaña llamada la montaña Yo-no-sé, y entonces dijo el más grande: lo que
debemos hacer es abrir aquí una cueva y quedarnos de una vez porque como aquí
no hay gatos aquí viviremos bien.
Trabaja que te trabaja tras de roer y roer agujereando las
cuevas se pasaron más de un mes hasta que una hermosa cueva lograron por fin
hacer con kioskos, jardín y gradas como si fuera un chalet.
Había entre los ratones que allí nacieron después una ratica
más linda que la rosa y el clavel. Su nombre no era ratona como tal vez
supondréis, pues la llamaban Hortensia que es un nombre de mujer.
Y era tan linda, tan linda que parecía más bien una violeta
pintada por un niño japonés: parecía hecha de plata por el color de su piel y
su colita una hebra de lana para tejer.
Pero era muy orgullosa y así ocurrió que una vez se le
acercó un ratoncito que allí vivía también y que alzándose en dos patas temblando
como un papel le pidió a la ratoncita que se casara con él.Raton
¡Qué ratón tan parejero! dijo ella con altivez. Vaya a
casarse con una que esté a su mismo nivel, pues yo para novio aspiro, aquí
donde usted me ve, a un personaje que sea más importante que usted.
Y saliendo a la pradera le habló al Sol gritando:
– ¡Jeeey! usted que es tan importante porque del mundo es el
rey, venga a casarse conmigo pues yo soy digna de ser la esposa de un personaje
de la importancia de usted.
– Más importante es la nube – dijo el Sol con sencillez-
pues me tapa en el verano y en el invierno también.
sol Y contestó la ratica:
– Pues que le vamos a hacer… Si es mejor que usted la nube
con ella me casaré
Más la nube al escucharla, habló y le dijo a su vez:
– Más importante es el viento que al soplar me hace correr.
– Entonces – dijo la rata- entonces ya sé que hacer si el
viento es más importante voy a casarme con él.
Mas la voz ronca del viento se escuchó poco después
diciéndole a la ratona:
– Ay Hortensia, ¿sabe usted?, mejor que yo es la montaña
aquella que allí se ve- porque detiene mi paso lo mismo que una pared.viento
– Si mejor es la montaña con ella me casare- contestó la
ratoncita-, y a la montaña se fue.
Mas la montaña le dijo:
– ¿Yo importante? ¡Je, je,je! Mejores son los ratones los
que viven a mis pies, aquellos que entre mis rocas tras de roer y roer,
construyeron la cuevita, de donde ha salido usted.
Entonces la ratoncita volvió a su casa otra vez y
avergonzada y llorando buscó al ratoncito aquel a quien un día despreciara por
ser tan chiquito él.
– ¡¡¡¡¡¡ Aaaaaaaaaalfreditooooooooooooooooooooo !!!!!!; ¡Oh,
perdóname, Alfredito – gimió cayendo a sus pies-, por pequeño y por humilde un
día te desprecié, pero ahora he comprendido -y lo he comprendido bien- que en
el mundo los pequeños son importantes también!
ratoncitos
El momento de las Marionetas
ÑE Y LOS MALABARES
NUESTRO COMPAÑERO RAFAEL MENDOZA, NO ESTUVO PRESENTE, PUES SU TRABAJO LE IMPIDIÓ ACOMPAÑARNOS HOY.
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